Un documento facilita el abordaje médico de la violencia hacia las mujeres y sus hijos

Las mujeres que han sido víctimas de la violencia de pareja presentan un riesgo cinco veces mayor de sufrir trastornos psiquiátricos frente a la población general, lo que implica que el 60% de ellas presente patologías de este tipo, como depresión, ansiedad y dependencia al alcohol y las drogas, entre otras. Muchas veces, señala el Dr Neyro, del Hopsital Universitario Cruces, estos trastornos están enmascarados en situaciones muy diversas de somatización, que es el mecanismo fundamental de defensa frente a la ansiedad que emplean (inconscientemente) las mujeres; se hace necesario profundizar en la historia clínica para descubrir el trasfondo que muchas alteraciones del ánimo esconden.

Así lo recoge el documento ‘El abordaje médico de la violencia hacia las mujeres y sus hijos’, elaborado por expertos del Col•legi Oficial de Metges de Barcelona (COMB), para ayudar a los sanitarios a identificar y tratar a las pacientes que sufren este tipo de violencia, según ha informado el colegio profesional en un comunicado.

El texto destaca que entre el 20% y el 40% de los suicidios en la población femenina estén directamente relacionados con el maltrato (Físico o psicológico, añade el experto en ginecología, Dr Neyro). Para que las víctimas reciban la atención adecuada, los médicos destacan la importancia de trabajar en red con las distintas instituciones implicadas, como los servicios sociales, los municipales, los policiales y los jurídicos.

El documento recuerda a los sanitarios que las víctimas utilizan más los servicios médicos que el resto de las mujeres y consumen más fármacos. Algunas veces, «los ginecólogos podemos ser testigos de actitudes de prepotencia o incluso de dominación en las parejas durante la consulta ginecólogica»; «debemos estar alerta» señala el Dr Neyro. Además, se subraya que los hijos son espectadores silenciosos del maltrato machista: entre el 30% y el 60% de los niños sufren abusos físicos, psíquicos y sexuales al mismo tiempo que sus madres.

El pasado 25 de noviembre se celebró el Día Internacional de violencia contra las mujeres y estas semanas previas a la Navidad, son buenas ocasiones para poner en nuestras vidas un recuerdo de las mujeres maltratadas.

Mejoras para la osteoporosis

La osteoporosis es un problema de salud pública tanto por su incidencia en la salud como por los gastos sanitarios que genera; por ello, hay que hacer lo posible para mejorar su abordaje, según han convenido los expertos que se han dado cita en la I Jornada de Salud Ósea de la Mujer, del Hospital Universitario Infanta Leonor y que se ha celebrado en la Agencia Laín Entralgo en Madrid el pasado 29.11.12.

Durante el encuentro, dirigido a profesionales de atención primaria y otras especialistas interesados en dicha dolencia como los ginecólogos, los intervinientes han recordado que la osteoporosis es una enfermedad que afecta principalmente a las mujeres -el 35% de las mujeres mayores de 50 años y hasta el 52% por encima de los 70 años la padecen– como consecuencia de la menopausia.

«Existen varias áreas que son manifiestamente mejorables en relación a la osteoporosis. Creo que es necesario profundizar en el diagnóstico extendiendo y mejorando la detección de la población de riesgo para centrar en esta los recursos y los esfuerzos diagnósticos y también, en paralelo con lo anterior, mejorar la cobertura terapéutica y su cumplimiento en aquella población en la que el tratamiento está indicado», ha señalado el jefe del servicio de Ginecología del citado centro, el Dr. Juan José Hernández Aguado.

Por otro lado, una de cada tres mujeres mayores de 50 años padecerá una fractura osteoporótica, que se producirá en la muñeca, la cadera o las vértebras. «Todas ellas pueden prevenirse con muy alta probabilidad, con tratamientos adecuados y potentes, sin efectos secundarios y muy eficaces», según señala el Dr Neyro del Hospital Universitario Cruces (en Baracaldo, Bizkaia), que ha intervenido como experto en la Jornada explicando la función de los nuevos anticuerpos monoclonales en las enfermedades del metabolismo óseo.

Las fracturas de cadera, aunque menos frecuentes que las de vértebras, son las más graves y las que implican una mayor carga clínica, social y económica. Un 20% de las pacientes mueren el año siguiente de padecerla, más del 50% de ellas no puede caminar sin ayuda al cabo de un año y el 27% son ingresadas en una residencia de larga estancia de forma permanente por pérdida de autonomía.Debemos actuar sin demora, ahora que «disponemos de un amplio arsenal terapéutico para combatir esta lacra del siglo XXI», señala el Dr  Neyro.

En España se producen unas 60.000 fracturas de cadera al año, que ocasionan un gasto sanitario que ronda los 400 millones de euros (solo en gastos de hospitalización, puntualiza el organizador y director de la Jornada, Dr. Hernández Aguado) y cerca de un millón de estancias hospitalarias al año, con una media de15 días de ingreso. Asimismo, se estima que la incidencia de las fracturas de cadera en mujeres registrará un incremento del 210% para 2050.