Archivo de la categoría: Sexualidad

Líbido y climaterio

El punto de vista tradicional de que la libido disminuye después de la menopausia es sobre todo cierto, pero las razones son complejas. Puede ser simplemente el resultado del envejecimiento o el resultado de la deficiencia de estrógenos. Pero también, puede ser la respuesta a un compañero menos activo sexualmente, ya que hay estudios que indican que si las mujeres posmenopáusicas tienen una pareja o parejas sexuales entusiastas entonces su libido se mantiene por muchos años después de la menopausia.

También es difícil entender lo que realmente es la libido. Viniendo de la raíz latina «lib-, Libet» – para querer o desear – no era originalmente un verbo relacionado con el sexo, pero sin duda el significado contemporáneo es claramente sexual. Pero incluso la libido o deseo sexual en relación con las mujeres o los hombres tienen otras connotaciones no sexuales en que se relaciona con la salud en general, a la auto-confianza, a la energía, y por lo general la forma en que una persona siente hacia su entorno y el cuerpo físico (es la pulsión libidinal de los psicoanalistas). Es fácil de aumentar la libido por la TH bien llevada y, aparte del evidente aumento en los eventos sexuales, como fantasías, tanto el coito, la masturbación y el orgasmo, también existe el efecto multiplicador de que las mujeres son más felices y tienen más energía y dar a conocer un aura de ser sexualmente confiadas. Las mujeres hablan de las ventajas adicionales que acompañan a una mejoría en su libido, en particular, su entusiasmo por la vida, confianza en sí misma en el trabajo, y un mayor sentimiento de amistad y complicidad con su pareja.

Libido es una extraña mezcla de cabeza, el corazón y las hormonas pero como ginecólogos sólo podemos influir realmente en la parte hormonal de esta tríada. Los psicólogos y psiquiatras pueden pensar que pueden alterar otros aspectos, pero los resultados son menos confiables y el tratamiento lleva mucho más tiempo. A pesar de ello la mayor parte de la literatura sobre el tratamiento de la pérdida de la libido no viene de los ginecólogos ni se relaciona con la terapia basada en hormonas (TH); la sexología tiene mucho que decir en este campo.

Las mujeres después de la menopausia a menudo tienen problemas de sofocos, sudores nocturnos, sensación de sudor y humedad y poco atractivo durante la noche. Tienen insomnio (temprano, mediano o tardío) y la pérdida de la libido a menudo toma la forma de un rechazo total incluso de su pareja. Esto es muy difícil de entender para ellos, si persiste el cariño a esa persona con la que han vivido felices durante 30 años, por ejemplo. También puede haber sequedad vaginal debido a la atrofia de la deficiencia de estrógeno relacionado a las relaciones sexuales que se tornan dolorosas. Estos (y seguramente otras más) son a menudo las causas físicas de la pérdida de la libido.

A menudo se afirma que las mujeres tienen una pérdida de la libido después de la histerectomía, pero esto no debería ocurrir incluso si se extirpan los ovarios pero se administra TH adecuada. Esto es contrario al mensaje dado casi a diario a cada mujer en artículos acerca de la histerectomía, que siempre indican que la operación provoca depresión, pérdida de la sexualidad, la falta de armonía con su pareja y así sucesivamente, cuando la realidad es que cada ensayo clínico aleatorizado única ha demostrado que la histerectomía con la TH apropiada se asocia con menos ansiedad, menos depresión, mejor la sexualidad y mejores puntuaciones de salud general.

Es muy raro que los periodistas continúen produciendo este mensaje de moda, pero cada vez más deshonesto sobre la histerectomía y sus posibles consecuencias. La deficiencia de esteroides ováricos subsiguiente a la ooforectomía será, por supuesto, capaz de producir los síntomas de la menopausia (todos predecibles….) y la pérdida de andrógenos ováricos producirá el síndrome de deficiencia de andrógenos de la mujer con pérdida de la libido, pérdida de energía, depresión, pérdida de concentración, e incluso dolores de cabeza y mialgias. Esto ocurre con frecuencia después de una histerectomía sin la TH adecuada y apropiada, pero se desconoce con qué frecuencia se presenta en mujeres normales de mediana edad que no han sufrido una histerectomía u ooforectomía. Probablemente es bastante común, pero es ignorado por la mayoría de los médicos que prescriben la TH y prácticamente todos los psicólogos y psiquiatras que no están familiarizados con el uso de hormonas.

Con la mujer peri o post-menopáusica habitual es fácil tratar las sofocaciones y sudores calientes y su insomnio resultante de la pérdida de los estrógenos y también resulta sencillo el tratamiento de la vaginitis atrófica (que causa dolor durante el coito) mediante estrógenos locales o sistémicas. La eliminación de los síntomas más conocidos y característicos de la deficiencia de estrógenos prolongado provoca claramente un efecto dominó y la sintomatología va cediendo poco a poco. La mayoría de las personas con estos síntomas claros de la menopausia podrían ser ayudadas por los estrógenos solos…., si los ginecólogas pusiéramos más empeño en nuestras actitudes respecto a las hormonas.

Sin embargo, sigue existiendo un grupo de mujeres sin sequedad vaginal y sin síntomas vasomotores que tienen esta pérdida incomprensible de la libido. También podrían ser ayudados por los estrógenos, pero el tratamiento más eficaz es mediante la adición de testosterona que, aunque disponibles cada vez por menos vías – pastillas, inyecciones , cremas y geles , sólo tiene licencia para su uso en las mujeres como un implante hormonal, en otros países. Uno de los mejores, asocia el estrógeno a la dosis habitual de 50 mg de estradiol con testosterona 100 mg y esto debe repetirse cada seis meses. La mejora de la libido se produce habitualmente en una semana y tiene una duración de unos cinco meses, momento en el que el implante debe renovarse. En las pacientes que han sufrido una histerectomía, este tratamiento es todo lo que se requiere. Las mujeres con útero necesitarán emplear progestágeno cíclico como Progesterona natural micronizada como mejor opción durante los primeros diez días de cada mes natural para producir un sangrado regular o pueden insertarse el progestágeno en el útero como un sistema intrauterino Mirena que protegerá el endometrio y también puede además suprimir los períodos mensuales por deprivación.

La pérdida de la libido es una condición común, muy prevalente, muy angustiante, pero perfectamente tratable en la mujer menopáusica. Para las mujeres que no tienen ninguna objeción a las hormonas, el estrógeno con o sin la testosterona, debe ser – en nuestra opinión – el tratamiento de primera línea, junto a los abordajes sexológicos.

Fuerte reducción del riesgo de verrugas genitales tras la vacunación contra el virus del papiloma humano

La reducción de la incidencia de verrugas genitales (VG) es uno de los primeros marcadores de la efectividad de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) a nivel de grandes masas de población.
Los daneses, capitaneados por Blomberg M y Dehlendorff C, acaban de publicar en la prestigiosa revista médica Clinical Infectious Diseases de octubre de 2013, no sus opiniones sobre la vacuna sino los resultados de su empleo en una gran cohorte de personas jóvenes danesas en términos de aparición de verrugas genitales, nos explica el Dr. Neyro, responsable de este web.
unnamed (3)
El objetivo de este estudio de cohortes fue utilizar la información individual sobre el estado de vacunación contra el VPH para evaluar el efecto sobre el riesgo de VG. Se identificó a todas las jóvenes nacidas entre 1989-1999 en Dinamarca y se obtuvo información sobre la vacunación contra el VPH en el periodo 2006-2012.
La cohorte se relacionó con los casos incidentes de VG, y se compararon las jóvenes vacunadas y las no vacunadas mediante modelos de riesgos proporcionales. En total, se vacunaron 248.403 jóvenes. El riesgo relativo de VG entre las jóvenes que habían recibido la última dosis en comparación con las no vacunadas fue 0,12, 0,22, 0,25 y 0,62 para las nacidas en 1995-1996, 1993-1994, 1991-1992 y 1989-1990, respectivamente (p<0,0001); esto significa reducción del riesgo de padecerlas, respectivamente, del 88%, 78%, 75% 38%, para los nacidos en cada uno de esos periodos. No se produjeron VG entre las mujeres vacunadas de la cohorte más joven (1997-1999).
Se concluye que la fuerte reducción en la ocurrencia de VG entre jóvenes vacunadas indica un efecto poblacional temprano y marcado del programa nacional de vacunación contra el VPH y puede esperarse un efecto similar sobre las lesiones cervicales precancerosas.

Un anticonceptivo oral masculino eficaz, seguro y fácilmente reversible podría estar disponible en diez años.

Investigadores de la Monash University en Victoria (Australia) han identificado una forma de bloquear el avance de los espermatozoides durante la eyaculación, lo que abre la puerta al desarrollo de la primera píldora anticonceptiva masculina. En concreto, y según informa en su último número de la revista “Proceedings of the National Academy of Sciences” la ausencia de dos proteínas -el adrenoreceptor alfa1A y el purinoreceptor P2X1- presentes en las células del aparato reproductor masculino logra evitar el transporte de los espermatozoides a través del mismo, sin que ello tenga efectos a largo plazo en la función sexual.

unnamed (2)

Este hallazgo, señala nuestro ginecólogo el Dr. Neyro, describe una nueva diana terapéutica para la anticoncepción masculina que hasta ahora no había sido explorada.

El bloqueo de esas proteínas se ha probado en un estudio en ratones pero, como señalan los investigadores Sab Ventura y Carl Wash, el hallazgo podría aplicarse al desarrollo potencial de una píldora anticonceptiva para hombres. «Hasta ahora, las estrategias se han centrado en objetivos o mecanismos hormonales que producen espermatozoides incapaces de fecundar, pero a menudo esto interfiere en la actividad sexual masculina y causar efectos irreversibles a largo plazo», indica Ventura.

En esta ocasión, se ha visto que la interrupción simultánea de estas dos proteínas que controlan el transporte de los espermatozoides durante la eyaculación provoca infertilidad masculina completa, «pero sin afectar a la viabilidad a largo plazo de los espermatozoides o la salud sexual de los varones». «El esperma está allí, pero el músculo no recibe el mensaje químico necesario para moverlo», ha apuntado.

Lo positivo de este descubrimiento, en el que han colaborado también científicos de las universidades de Melbourne y Leicester (Reino Unido), es que ya hay un fármaco en el mercado que permite bloquear una de las dos proteínas, explican los autores, por lo que sólo sería necesario encontrar otro compuesto que permita bloquear la otra.

«Hemos encontrado una diana terapéutica para la anticoncepción masculina. El siguiente paso sería desarrollar un anticonceptivo oral masculino eficaz, seguro y fácilmente reversible», ha asegurado Ventura, que apunta que esta nueva píldora podría estar disponible en diez años.

62 años después de la introducción de la anticoncepción oral femenina, su introductor, el químico Carl Djerassi  explica que la píldora anticonceptiva masculina no existe porque “a las grandes compañías farmacéuticas no les interesa gastar los millones de dólares que costaría estudiar sus efectos secundarios”. Algo que el químico, defensor de los derechos de las mujeres, lamenta, puesto que la carga de la responsabilidad reproductiva recae sobre ellas…

Ahora, con este estudio, señala Neyro, podría abrirse una puerta real a la futura consecución de una anticoncepción segura y fiable para los varones.

La disfunción eréctil genera más tensión y problemas de sueño a las mujeres que a los propios afectados

 

 

 

 

 

 

 

La disfunción eréctil, que afecta a más de la mitad de los varones de más de 40 años, también tiene consecuencias en sus parejas, incluso más que en ellos mismos, según los resultados de un estudio internacional, que ha evidenciado que las mujeres sufren más tensión, discuten más y tienen más interrupciones de sueño que los propios afectados.

El objetivo de la encuesta -en la que han participado más de 1.500 personas de Francia, España, Italia, Alemania, Reino Unido, México, Brasil y Canadá- era conocer en qué medida afecta a la relación de pareja la aparición tanto estos problemas de erección y cómo los síntomas urinarios provocados por las hiperplasias benignas de próstata.

Todos los encuestados afirmaron que ellos (por los hombres encuestados) o sus parejas (por las mujeres encuestadas) habían padecido disfunción eréctil y al menos uno de los síntomas urinarios característicos de la hiperplasia benigna de próstata.

El 77% de las mujeres y hombres encuestados coincidieron en que ambos trastornos interfieren y limitan la capacidad de disfrutar de la vida en pareja.

Los que más destacaron esta limitación provocada por los problemas de salud de varón fueron los italianos (hombres 89%, y mujeres 91%), seguidos por los españoles (hombres 81%, y mujeres 78%).
Sin embargo, al ser preguntados por las consecuencias de estos problemas, las mujeres se mostraron más afectadas, y no sólo en su vida sexual (75% de las mujeres, frente al 70% de los hombres). También estaban más tensas (43%, frente al 30% de los hombres), discutían más (22% frente al 15%) y sufrían más interrupciones del sueño (39% frente al 33%). Además, los encuestados españoles destacaron que las actividades en común que más se resienten y echan de menos debido a los síntomas de la disfunción eréctil y la hiperplasia benigna son, tras la actividad sexual, una noche romántica, las actividades de ocio en el exterior y viajar.

Por otro lado, la encuesta revela que un gran porcentaje de hombres (76%) y mujeres (78%) habían hablado con su pareja sobre ambos problemas. Los hombres del Reino Unido (68%) y las mujeres de Brasil (70%) fueron los que menos habían abordado el tema, frente a los hombres de Canadá (86%) y las mujeres italianas (89%), más favorables a tratar abiertamente los problemas urológicos del varón. No obstante, el 35% de los hombres y el 41% de las mujeres reconocieron que tardaron más de seis meses en iniciar una conversación del tema con su pareja.

En España un 83% de los hombres había hablado con sus parejas sobre los problemas de disfunción eréctil y HBP, porque «necesito el apoyo de mi pareja», «es importante para mí», «necesitamos mejorar nuestra vida sexual» o «necesitaba hacer algo al respecto».

Los hombres españoles afirmaron además que, en el 88% de los casos, fueron las mujeres quienes iniciaron la conversación sobre el problema de salud.

Por otro lado, el 40% de los hombres con disfunción eréctil reconoce que tardó más de siete meses en acudir al médico para buscar una solución. La razón más común era que si no habían buscado ayuda antes fue porque pensaban que «se terminaría pasando con el tiempo». No es infrecuente, señala nuestro experto el Dr. Neyro, que la disfunción eréctil del hombre la consulte la mujer en la consulta del ginecólogo…., incluso sin la presencia del afectado; es el viejo «ocúpate tú cariño…»; señala nuestro ginecólogo, el Dr. Neyro, que tantos hombres emplean para descargar sus responsabilidades también en este asunto…..

En el caso de la hiperplasia benigna, un 30% de los hombres con problemas urinarios esperaron al menos siete meses antes de visitar al médico, y la principal razón esgrimida por los hombres que no habían buscado tratamiento fue que «es algo natural de la edad».

Los varones españoles encuestados que sí habían buscado tratamiento frente a la disfunción eréctil que padecían explicaron que lo hicieron ya que querían recuperar su deseo sexual, evitar el impacto negativo que estaba teniendo en la vida sexual de la pareja y cuidar su salud. En el caso de la hiperplasia benigna, argumentaron también que tenían miedo de que estuviera relacionado con asuntos médicos más serios.

«Prevenir es vivir seguro» (y más en el verano….)

La maána 18.07.13.4En el verano, con el calor, con la prolongación de los días, con las noches más cálidas, la playa, las piscinas….y otros muchos factores, se suele apreciar un re-aumento de las infecciones vaginales en particular, de las infecciones de transmisión sexual en general. El Dr. Neyro se había ocupado de estos asuntos recientemente (ver en  http://www.neyro.com/2013/07/16/nuevo-plan-para-frenar-el-repunte-de-las-infecciones-de-transmision-sexual/) y precisamente para hablar de estos temas y de la forma de prevenir muchas de estas infecciones acudió el 18 de julio de 2013 al programa de TVE La Mañana de la 1 en su sección «Saber vivir» de la que es colaborador habitual.
Puede seguirse esta participación en el link http://www.rtve.es/alacarta/videos/la-manana-de-la-1/saber-vivir-18-07-13/1943214/, fundamentalmente a partir del minuto 28 del programa.

Si quiere tener sexo del bueno, haga deporte

Puede ser la excusa perfecta o el argumento de peso por el cual, definitivamente, se decida a practicar deporte ¿O no?… A nadie le amarga un dulce y si encima, “ese dulce” ayuda a darle una alegría al cuerpo y quemar calorías, las ventajas de su práctica están más que justificada.

Hasta ahí es posible que todos, más o menos, seamos conocedores de las bonanzas de practicarlo, pero en el plano de las investigaciones y de la ciencia, hay que mencionar al Dr.Omer Faruk Karatas, de la Universidad Faith en Ankara, Turquía, que es al autor de una investigación que confirma que “no solo la buena función sexual de los hombres depende del flujo sanguíneo en los genitales, también la de las mujeres”; y apunta que, los problemas sexuales de la mayoría de las mujeres con la excitación sexual y la respuesta sexual se deben a un flujo sanguíneo insuficiente en el área genital.

En ese sentido, según la investigación, practicar ejercicio de forma regular puede contribuir, y mucho, a mejorar el flujo sanguíneo en el clítoris y potenciar así la función sexual femenina.

El Dr. Faruk declaró al Mundo.es que éste es el primer estudio que compara a atletas de elite y mujeres sanas respecto a la función sexual y el flujo sanguíneo del clítoris; el objetivo era evaluar los efectos de practicar ejercicio de forma regular en ambos grupos.

El clítoris es un órgano eréctil que contribuye, significativamente, a la función sexual, especialmente durante la excitación y las distintas fases del orgasmo. La sexualifdad en la mujer, señala el experto Dr Neyro, no está limitada al clítoris pero su participación en la actividad sexual femenina, sola o acomañada, es fundamentral. Las medidas del flujo sanguíneo clitorídeo con ultrasonido doppler (que es una técnica especial que evalúa la circulación de la sangre a través de los vasos sanguíneos) se están llevando a cabo frecuentemente con el fin de establecer la función o la disfunción sexual femenina, por ejemplo, tras el consumo de medicación o de una cirugía de genitales”, según declaró el director del ensayo.

Pruebas y resultados

Los científicos realizaron la prueba en 25 jugadoras de balonmano y voleibol de entre 20 y 45 años, sexualmente activas, que practicaban ejercicio regular (un mínimo de cuatro horas al día). A todas ellas las compararon con otras tantas mujeres sanas, con la misma media de edad, que realizaban dos horas de deporte a la semana.

Ninguna de las atletas usaba testosterona u otras hormonas anabolizantes. Y tampoco ninguna de las participantes padecía enfermedad genitourinaria, vascular, endocrina, ni había tenido un hijo en los seis meses previos al ensayo, según especificó el doctor Faruk.

Además de realizar la prueba doppler a todas las integrantes del estudio, los científicos llevaron a cabo un cuestionario que evaluó la función sexual y que contemplaba, entre otros aspectos, el deseo, la lubricación, el orgasmo, la satisfacción…

Los resultados de las investigaciones de Faruk y de su equipo demostraron que el ejercicio regular incrementa el flujo sanguíneo en el clítoris. Y que, según las encuestas que realizaron los investigadores, las atletas confesaron tener una mejor función sexual que las mujeres sanas del estudio.

Por otra parte, Santiago Palacios, director del Centro Médico Instituto Palacios Salud de la Mujer (Madrid) también confirma que “el deporte es una de las dos herramientas que ha demostrado su utilidad a la hora de mejorar el flujo sanguíneo en la zona genital de hombres y mujeres”. La otra herramienta es el alcohol pero, es muy importante señalarlo, en dosis moderadas. En este sentido afirma el Dr Neyro, pasarse de un vaso de vino tinto al día, en el caso de la mujer, conlleva la etiqueta de bebedora excesiva y se pierden las propiedades saludables del alcohol.

El ejercicio funciona, según Palacios, a dos niveles: “Elevando las endorfinas, que actúan como un neuromodulador y aumentando el flujo sanguíneo. Se sabe que ambas vías mejoran la función sexual de hombres y mujeres. También está demostrado que las féminas que realizan ejercicio regular tienen mejor función sexual que las sedentarias”.

Con todos estos argumentos, y aunque sea de manera regular, la invitación a practicar ejercicio es una tentación más porque, a las prestaciones que nos otorga (que ya conocemos como la prevención de enfermedades cardiovasculares, la obesidad o la diabetes) se le suma la mejora del sexo. Y no sé por qué me da que pocos se negaran (por no decir nadie) a sacarle más partido o a mejorarlo…