Relaciones entre la infertilidad y las vaginitis, a veces minusvaloradas.

Lo admito desde el principio; ahora, en los últimos años, al hablar de reproducción asistida nos interesan otros temas distintos. Ponemos mucho mayor énfasis por ejemplo en la seguridad de los procedimientos. No olvidemos que tras cada intento, a veces, está la llegada de un nuevo ser a este mundo. ¿Serán los niños nacido de los procedimientos de reproducción asistida igual de noe¡rmales que los de las concepciones más naturales? Lo debatimos en profundidad en https://www.neyro.com/2021/03/08/seran-igual-de-normales-los-ninos-de-la-reproduccion-asistida-una-duda-que-se-mantiene-viva-hace-mas-de-40-anos/

Efectivamente, hemos descuidado otros temas que en los años 80 del pasado siglo eran más acuciantes; por ejemplo las grandes infecciones de la pelvis, las grandes enfermedades inflamatorias pélvicas y el daño consecuente a las trompas que impedía después esa concepción natural. Ciertamente nos ocupábamos de otras cosas (como cuando verificábamos los diagnósticos previos en función de los resultados obtenidos; ver en https://www.neyro.com/2019/08/23/nacimientos-y-concepcion-espontanea-tras-fracaso-repetido-de-reproduccion-asistida/)
Pues ahora, de pronto, autores del máximo prestigio nos recuerdan que lo que podrían ser consideradas infecciones menores como algunas vaginitis o vaginosis y otras más serias, pueden interferir con la concepción. Veamos; ellos afirman que la vaginosis bacteriana (VB), la enfermedad inflamatoria pélvica (EPI) y la endometritis son infecciones del tracto genital (ITS o infecciones de transmisión sexual), que pueden provocar muchos efectos adversos, incluida la infertilidad.
La vaginosis bacteriana se caracteriza por una menor prevalencia de lactobacilos y una mayor prevalencia de bacterias anaerobias, incluida Gardnerella vaginalis, Megasphaera spp y Atopobium vaginae. De probióticos sí que nos hemos ocupado y largamente en este blog (léase en https://www.neyro.com/2017/07/27/salud-vaginal-durante-el-verano-de-prebioticos-y-probioticos/) La endometritis y la enfermedad inflamatoria pélvica son causadas por el ascenso de bacterias patógenas al útero, aunque los mecanismos por los que lo hacen no están claros.

Los autores del manuscrito que ahora comentamos perteneces al prestigioso grupo de mi buen amigo de tantos años, el Dr Carlos Simón; el artículo se publicó bajo el título » Bacterial vaginosis and its association with infertility, endometritis, and pelvic inflammatory disease»; está a disposición del lector interesado en https://www.ajog.org/article/S0002-9378(20)31193-5/fulltext. Reproducimos aquí su primera página del Am J Obstet Gynecol. 2021 Mar; 224(3): 251-257.

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La vaginosis bacteriana (en la imagen de abajo, los criterios para su diagnóstico, extraídos de la propia publicación), la endometritis crónica y la enfermedad inflamatoria pélvica se han relacionado con infertilidad en estudios retrospectivos y prospectivos. De manera similar, las causas de la vaginosis bacteriana y la infertilidad relacionada con la endometritis probablemente sean multifactoriales y se deriven de la inflamación, la respuesta inmunitaria a los antígenos del esperma, la presencia de toxinas bacterianas y un mayor riesgo de infecciones de transmisión sexual.

El diagnóstico y tratamiento de la vaginosis bacteriana (en la imagen de abajo los criterios para el tratamiento de la misma en la versión del colegio Americano de Obstetricia y ginecología para mujeres no gestantes), la endometritis crónica y la enfermedad pélvica inflamatoria antes de intentar la concepción pueden ser componentes importantes de la estrategia preconcepcional de mujeres sintomáticas para mejorar los resultados de la reproducción natural y asistida.

Una vez más, como decía Sherlock Holmes, el éxito de los temas puede estar en los pequeños detalles; así, en el terreno de la infertilidad, nos recuerda el gran Carlos Simón y sus co-autores, que la VB (vaginosis bacteriana) sintomática (y posiblemente la VB asintomática) debe tratarse con urgencia. para prevenir las secuelas de la VB, incluidas las ITS, EPI y endometritis, que parecen contribuir a un mayor riesgo de esterilidad. Seguiremos informando…