Bajar de peso antes de la gestación reduce el riesgo de muerte del lactante

Sabíamos hace tiempo que el tipo de dieta que sigue la gestante está en íntima relación con la evolución del embarazo e incluso con su resultado en términos de duración y presencia de prematuridad, por ejemplo (léase enhttp://www.neyro.com/2014/03/14/una-dieta-equilibrada-en-el-embarazo-podria-reducir-el-riesgo-de-parto-prematuro/)

Ahora, además, conocemos con evidencia científica que lograr un peso saludable antes del embarazo y tener un peso corporal adecuado durante el mismo reduce significativamente el riesgo, incluso, de que el lactante muera en su primer año de vida, según una nueva investigación realizada por la Escuela de Posgrado de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh. El estudio original puede leerse en http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/oby.21335/abstract)

Los hallazgos, como señalamos publicados en la revista Obesity, resaltan la necesidad de un enfoque exhaustivo en la reducción de la obesidad en mujeres en edad de procrear, que comprende la asesoría en torno al peso corporal antes de la concepción y durante el embarazo. La investigación fue financiada por el National Institutes of Health (NIH). No existe una dieta ideal para todos los embarazos como señalamos anteriormente en http://www.neyro.com/2015/07/10/existe-una-dieta-ideal-para-todo-el-embarazo/, pero mantener el peso en los estándares de normalidad debe ser un objetivo y máxime en edad fértil, señala José Luis Neyro de www.neyro.com.

«Una de cada tres mujeres comienzan el embarazo con un peso no saludable, y más de la mitad de las mujeres aumentan demasiado o disminuyen muy poco el peso durante el embarazo», dijo la autora principal Lisa Bodnar, PhD, M.P.H., R.D., profesora asociada en el Departamento de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh. «Aunque se necesita más investigación, tenemos la esperanza de que este estudio se pueda utilizar para iniciar un diálogo entre médicos y mujeres sobre la importancia de no sólo lograr un peso corporal saludable durante el embarazo, sino también disminuir el peso excesivo antes de la gestación, como una posible forma de mejorar la sobrevida del lactante».

Cada año, aproximadamente 24.000 lactantes mueren en el primer año de vida en Estados Unidos. La tasa estadounidense de 6,1 muertes por 1000 nacidos vivos, ocupa el vigesimosexto lugar en el mundo, pese a una disminución del 20 por ciento en la tasa de mortalidad del lactante en Estados Unidos entre 1990 y 2010. En España, la tasa de mortalidad infantil se mantiene en 3,1 defunciones por cada mil nacidos, similar a la de 2011, señala José Luis Neyro (era del 4.2 en el año 2002; desde entonces el descenso es más complicado, pero continúa….).

Solo África (sobre todo central y subsahariana) y el sur y sudeste de Asia se mantienen por encima de 40 muertes por 1000 nacidos vivos; el resto del mundo, Europa por supuesto, está entera por debajo de los 20 casos, según datos estadísticos referidos a 2012, destaca nuestro experto ginecólogo. «Actualmente, las malformaciones congénitas siguen siendo la primera causa de muerte infantil», continúa.

La Dra. Bodnar y sus colaboradores examinaron registros de más de 1,2 millones de nacimientos que ocurrieron entre 2003 y 2011 en Pensilvania, incluidos 5530 fallecimientos de lactantes. Las muertes de lactantes se definieron como la muerte de un lactante antes de su primer año de edad.

Para el estudio que ahora comentamos, se clasificó a las madres bajo las categorías de peso subnormal, peso normal, preobesidad u obesidad, la cual se dividió en tres grados, con base en su índice de masa corporal antes del embarazo -una medida de peso con relación a la estatura-. En cada grupo de peso, los investigadores también analizaron la repercusión de la mortalidad del lactante cuando las mujeres durante el embarazo de aumentaron peso significativamente más o menos que las directrices establecidas por el Instituto de Medicina de Estados Unidos, las cuales, por ejemplo, recomiendan un aumento de peso de 11 a 16 kg para las mujeres con peso normal y de 5 a 10 kg para las mujeres obesas.

En todas las categorías de peso corporal, excepto en las personas más obesas, subir de peso menos o mucho más que lo recomendado incrementó el riesgo de muerte del lactante. Sin embargo, aun cuando las mujeres obesas obtuvieron un peso óptimo durante el embarazo, el riesgo de muerte del lactante todavía fue de aproximadamente el doble que el de las mujeres que comenzaron el embarazo con un peso normal. El sobrepeso y la obesidad, así considerados, tiene más relevancia en la mujer por su responsabilidad social de la descendencia, evidentemente (ver más sobre el tema en http://www.neyro.com/2015/12/08/de-verdad-los-chicos-son-fofisanos-y-las-mujeres-fondonas-a-partir-de-esos-anos/)

«La obesidad y la mortalidad del lactante son hoy en día uno de los problemas de salud pública más críticos», dijo la coautora, Dra. Katherine Himes, profesora asistente del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Pittsburgh. «Nuestro estudio resalta la importancia de analizar la reducción de peso con las mujeres obesas antes del embarazo pues bajar de peso durante la gestación puede aumentar el riesgo de que muera su lactante.

Esperamos que esta información apoye a los médicos, entre ellos, obstetras, médicos de familia y médicos de atención primaria, a explicar las ventajas de la reducción de peso antes de la concepción a todas las mujeres obesas en edad de procrear, continua la coautora del estudio que comentamos. Y es que nos preparamos para ser taxista o médica, para diseñar automóviles o para limpiar el ante de las tapicerías…., pero no para ser madre, como destaca nuestro experto el Dr. Neyro. /(leer más de este tema en http://www.neyro.com/2015/08/24/nos-preparamos-para-casi-todo-menos-para-la-maternidad/).

Referencias: Lisa M. Bodnar et al, Maternal obesity and gestational weight gain are risk factors for infant death. Obesity, 2015; DOI: 10.1002/oby.21335